Todas las mujeres que habitan en mi

[ Escucha tu voz interior y comenzarás a escuchar la sabiduría de tu alma para que te guie ]

Este título corresponde a un álbum de una cantante que pretendo ir a ver muy pronto, y lo tomo prestado porque hoy me hace un ruido tremendo.
Dentro del álbum busca explicar las mil caras con las que como mujer se tiene que lidiar y entiendo lo importante que es estar en paz con todas.
Una de ellas y las más compleja es la culposa:
   ...Que la destruyan que no quiero estar tentada a tenerla ni ha mirarla...
Claramente es mi talón de Aquiles. He tenido conversaciones profundas con personas en donde esta palabra está casi fuera de su vocabulario y me he llenado de su sabiduría buscando encontrar ese método especial que hace que se laven la cara, den un respiro y continúen con los hombros sueltos.

Continuo. Una de mis favoritas es la que esboza esa palabra que cuesta mucho hacerla propia porque implica salir de la zona de confort para encontrarse con un otro, y es pedir.
 Pideme, pídeme, pideme.
    ... El diario de mi piel, lo que jamás seré, la tentación cuando estemos a oscuras...

Tener que lidiar con todas las mujeres que habitan en mi es un reto bastante interesante que vale la pena y la alegría diariamente, sin contar que las hormonas hacen de las suyas una vez al mes por al menos una semana y eso, eso sí que es un lío, todos los días algo nuevo.
Lo que se, es que se duerme una y despierta otra.
Nunca se a quien le va a tocar, desconozco sus turnos, sus horarios, tampoco sé cómo se han organizado si es que lo han hecho, pero lo que sí se y tengo muy claro, es que no pueden vivir separadas, que cada una es valiosa, es perfecta, es única...cada una soy yo y las quiero, así tal cual, porque todas me han enseñado, porque todas me han mostrado que me aman, así tal cual, que no piden nada más que ser aceptadas y respetadas.

De todas las mujeres que habitan en mi, juro que hay algunas que yo ni conozco.


...Ay mi amor ,he dejado tantas pistas en tu puerta que locura sentirla entre abierta y que nunca me atreva a llamar...